domingo, 9 de diciembre de 2012

Tontos no son... aunque incapaces seguramente

Esta mañana, un amigo, @JorgeCansinos, publicaba en Twitter un enlace a un blog en el que el autor hacía un análisis de por qué las políticas económicas del gobierno no conducen a ningún sitio. El contenido del mismo está bien pero, la verdad, aporta poco de novedoso porque simplemente abunda en algo que todo el mundo sabe: las políticas de recorte no conducen más que a la paralización de la economía. La pregunta es: si todos lo tenemos tan claro ¿por qué el gobierno parece no darse cuenta de ello?. Mi opinión personal es que sí que se dan cuenta porque creo que tontos, al menos, no son. Entonces, si se dan cuenta de que el camino por el que van no lleva a ningún sitio ¿por qué se empeñan en seguir por el mismo? Pues, de nuevo mi opinión personal -que para eso es mi blog- es que simplemente son incapaces de hacer otra cosa. El gobierno parece haberlo apostado todo al refrán "No hay mal que cien años dure..." pero parece que se les ha olvidado la segunda parte del mismo "... ni cuerpo que lo resista".

Sin embargo, no sé por qué nos sorprendemos de ello. Por un lado, con independencia de que la mayor parte de las medidas que están tomando no tienen nada que ver con su programa electoral, sólo hay que ver cuál era su principal argumento por el cual todos debíamos votarles "ZP es el mal, basta con que se vaya y lleguemos nosotros para que se genere una confianza inmediata en la economía española que nos sacará de la crisis en un par de telediarios". Bueno, efectivamente ZP podía ser el mal, pero el problema era algo más profundo que eso y está claro que no bastó la llegada del PP para que todo se arreglase. ¿Qué pasa después? Pues pasa que parece que Mariano no tenía plan B. Se encontró con que la economía no mejoraba por arte de magia y se quedó sin recursos. Mariano no sabe por dónde salir. Estoy convencido de que el mismo sabe que una política basada sólo en recortes no lleva a ningún sitio pero no sabe qué otra cosa hacer. Así como ZP culpaba a "la crisis internacional que vino del otro lado del Atlántico" de todos los males de nuestra economía, Mariano se ha echado en brazos del entorno internacional para que nos saque de ella, siguiendo a pies juntillas todas las indicaciones de recortar, recortar, recortar... que llegan desde Alemania. Mariano vive en la esperanza de que la crisis internacional se acabe y, simplemente por contagio. empecemos a crecer porque sí. Es decir, vive en la esperanza de que la crisis no dure cien años (o diez o los que sean), pero se olvida de que como dure más de la cuenta nuestro cuerpo, nuestro país, no lo va a resistir.

Vaya por delante que estoy de acuerdo en que el gasto público debía reducirse aunque difiero en la forma en la que debía hacerse. Los recortes se han limitado a suprimir, uno detrás de otro, servicios públicos en lugar de recortar toda la grasa que existe en la administración pública. Es como si en una familia en crisis, en la que los gastos son mayores que los ingresos, para ahorrar, se decide suprimir la cena mientras se mantienen las vacaciones en el Caribe. Aquí el gobierno ha decidido recortar en educación, sanidad, etc.mientras no toman la iniciativa de reducir toda la burocracia innecesaria originada en el siglo XIX y que seguimos manteniendo hasta nuestros días. Eso por no hablar de subvenciones a partidos, fundaciones, coches oficiales, etc. que por más que sean el chocolate del loro son inaceptables. No, tomar esas decisiones es más complicado porque hay que pensar, tener iniciativa -en el caso de la reducción de burocracia- o renunciar a privilegios -en el caso de subvenciones y coches- y no están dispuestos a hacer ninguna de las dos cosas.

Cada día cuando abro (figuradamente) la prensa, espero encontrarme una declaración del gobierno presentando toda una serie de medidas para reactivar la economía... pero no. La música no cambia y la letra es siempre la misma: recortes por un lado, subida de impuestos por el otro. Lo más desesperante es que a uno le gustaría pensar que ya que el gobierno no parece tener la solución existiese una oposición con propuestas diferentes pero qué va, el supuesto partido de la oposición sólo propone subir o crear nuevos impuestos: impuestos a las grandes fortunas, impuestos a las transacciones financieras, recuperar el impuesto del patrimonio... pero de medidas para estimular la economía ni una. Eso sí, la verdad que el PSOE está mucho más preocupado en autoaniquilarse que en cualquier otra cosa, así que tampoco se les puede pedir mucho más.

Medidas que se pueden tomar... muchas. A mí, sólo viendo mi entorno se me ocurren unas cuantas. Simplemente con que a alguien se le ocurriese revisar el proceso de creación de empresas ya sería un buen estímulo. Hace poco, con un amigo que se planteaba empezar a desarrollar actividades profesionales de forma independiente, descubrimos un blog en el que el autor proponía crear una empresa en el Reino Unido en lugar de en España. Las ventajas eran tremendas, no sólo desde el punto de vista de plazos sino de obligaciones de las nuevas empresas. ¡Qué envidia tú! Al final, la verdad que la cosa era difícil de aplicar pero porque si se hacía de aquella manera se corría el riesgo de que, de todas formas, la burocracia española se lanzase a tu cuello en forma de todo tipo de sanciones. Es decir, parece que en lugar de ver cómo copiar el esquema de creación de empresas en otros países que aporta una grán agilidad a la economía, aquí el esfuerzo está en ver cómo hacemos que todo el mundo se mantenga dentro de nuestro redil. Que sí, que ya sé que hace meses se desarrolló un procedimento "exprés" de creación de empresas... paparruchas desde mi punto de vista en la medida de que en dicho procedimiento sigue interviniendo el notario, el registro mercantil, la AEAT, la seguridad social, los bancos...

A veces pienso que el problema de nuestro país es tan estructural que no tiene solución. Bueno, realmente sí tendría solución pero un tanto drástica: algún tipo de desastre natural que se llevara por delante la estructura del estado y hubiera que crearla desde cero. Estos momentos de pesimismo, la verdad, me duran poco porque al rato vuelvo otra vez a ver que nuevas ideas se nos ocurren para reinventarnos nuestra empresa y salir de la crisis por nuestros propios medios ya que como nos quedemos esperando a que sea el gobierno el que nos saque "nuestro cuerpo no aguantará".

Un saludo a todos y buen domingo!




No hay comentarios:

Publicar un comentario